Retorno al equilibrio

“Durante las fiestas se consumen alimentos de alta densidad calórica (se aportan muchas calorías en poca cantidad de alimento); es por esto que, para poder desintoxicar al organismo después de estos eventos, es necesario llevar una alimentación liviana, tener una buena hidratación y realizar actividad física”, señala Julieta Lupardo, nutricionista de Halitus Instituto Médico.

La especialista destacó que es de fundamental importancia no saltear ninguna comida y a su vez saber qué alimentos seleccionar en cada una de ellas.

Una de sus sugerencias para el desayuno es consumir una infusión con leche descremada y edulcorante acompañado de una fruta (evitando banana, uva e higo) y una porción de queso fresco descremado. Otra buena opción para arrancar el día es consumir un licuado de frutas realizado con leche descremada acompañado con una porción de queso fresco descremado. “De esta manera, se evita el consumo de harinas, alimento incorporado de manera excesiva durante las fiestas de fin de año”, explicó.

Con lo que respecta a las opciones de almuerzo y cena, Lupardo indicó que se deben seleccionar verduras de todos los colores para poder incorporar las vitaminas que el organismo necesita y a su vez empezar a quemar la grasa acumulada. Ambas comidas pueden estar acompañadas de pollo (preferentemente pechuga) o pescado (atún, merluza, brótola, salmón), ya sea al horno o a la plancha.

Los jugos son estrella

Las limonadas y licuados que ayudan a desintoxicar el organismo también son una opción que ganó seguidores, teniendo en cuenta la importancia de la hidratación.

Según explican algunos autores de libros sobre las virtudes de estos tragos, como Kimberly Snyder, los vegetales alcalinizan el organismo y ayudan a eliminar toxinas. Los jugo contienen una cantidad de nutrientes fáciles de asimilar. Son antioxidantes, por lo que ayudan a luchar contra los radicales libres.

La nutricionista de Halitus menciona algunos ejemplos: dentro de las limonadas la más conocida y con un alto poder desintoxicante es la que contiene limón y jengibre rallado (un litro de agua, una cucharadita tipo té de jengibre rallado y una taza tipo té de jugo exprimido de limón). Otro jugo veraniego desintoxicante es el que lleva limón y pepino (puede sumarse una cucharadita de semillas de chía al momento de tomarlo). Zanahoria y apio es también una combinación sugerida por la especialista.

En tanto, en el blog Chamana Moderna, escrito por Cecilia Martínez Ruppel, proponen un jugo detox para sentirse livianos y frescos: lleva pepino, manzana verde, jengibre, pera y espinaca. Sugiere tomarlo en ayunas.

A pesar de que la moda de los jugos prendió fuerte y generó hábitos saludables, los especialistas también advierten sobre su consumo riesgoso. “Bajo ningún concepto puede tomarse sólo esos jugos nada más durante el día porque no aportan energía, sólo aportan sustancias que detoxifican el hígado. No hay que hacer locuras para adelgazar. Eso ayuda en tanto y en cuanto se acompañe con una comida adecuada”, alertó Lupardo.

Verde que te quiero

Sofía Vega, de la publicación virtual Cocinar es divertido (puede encontrarse con ese nombre en Facebook) brinda también algunos consejos de desintoxicación.

“Lo mejor es empezar a consumir crudos. Lo que pasa con las cosas crudas es que tienen enzimas; las cosas crudas están en estado latente, dan vida, y como nosotros somos personas naturales necesitamos consumir cosas de ese nivel. Lo crudo es energía de primera calidad, se digiere automáticamente. Por eso, si estos días se consumen crudos el cuerpo no va a tener que esforzarse por digerir la comida y se va a poner a limpiar las toxinas que acumulamos y nos hacen sentir mal o pesados; esa pesadez es enfermedad y una ensalada es liviandad”. Y recomienda: “Un jugo fácil es de sandía sola, que sacia, hidrata mucho, es de estación y limpia los riñones”.

Una mañana con tiempos más lentos

Para Sofía Vega, de Cocinar es divertido un buen consejo es derribar el mito de que el desayuno es la comida más importante. “A la mañana hay que comer liviano para ayudar al cuerpo a que termine de digerir la comida del día anterior, volver a reactivarlo de a poco, con un jugo por ejemplo. Y que el almuerzo sea la comida más importante”, señala.

Ella propone alargar el ayuno de la noche. “Cuando nos despertamos el cuerpo está en reposo, eliminando lo que no le sirve de lo que digirió. Una forma de ayunar es seguir el ritmo de la mañana ingiriendo cosas que ayuden a ese proceso, como agua tibia con limón, jugos verdes y tisanas de hierbas, manzana rallada o duraznos”, ejemplifica.

Por su parte, Julieta Lupardo aporta opciones para las colaciones de la tarde o la mañana: aspic de frutas o un puñado de frutos secos. Indica además que otro alimento importante a tener en cuenta que aporta muy bajas calorías y puede ser utilizado en almuerzo y/o cena es la clara de huevo. Puede consumirse en un omelette realizado con queso fresco descremado, en un suflé de vegetales o como un ingrediente más en la ensalada.