Reproducción asistida: una nueva técnica evita embarazos múltiples
Para nadie es lo mismo esperar un hijo que tres, o cinco. Los embarazos múltiples configuran una de las complicaciones más temidas en los tratamientos de esterilidad y las últimas investigaciones en este campo apuntan a evitarlos. El denominado co-cultivo embrionario, nuevo recurso en las técnicas de reproducción asistida, resulta un medio adecuado no sólo para disminuir los embarazos múltiples sino para saber más sobre el potencial evolutivo de los embriones. Con esta técnica se demuestra en el laboratorio el descarte de los embriones, que se produce en mayor medida cuanto menor es su calidad.
Al explicar que la mayoría de los embriones que se forman, producto de la unión de un espermatozoide con un óvulo, no necesariamente van a terminan siendo un bebé, el doctor R. Sergio Pasqualini, director médico de Halitus Instituto Médico, sostiene que el sistema reproductor humano es fantástico pero poco eficiente.
El descarte embrionario natural, que se da tanto en embriones formados de relaciones naturales como en los obtenidos en laboratorio, depende de la calidad del embrión, resultando de la del espermatozoide y del óvulo que lo originó.
Por eso, en parejas con problemas de esterilidad, si la causa radica en la mala calidad de estos elementos, el descarte embrionario va a ser mayor.
En las técnicas de fertilización in vitro (FIV), la transferencia embrionaria se realiza generalmente a las 48 horas, cuando los embriones se encuentran en estadio de 4 células, o a las 72 horas, en estadio de 8 células.
La cantidad de embriones que se van a transferir depende fundamentalmente de su calidad —además de la causa de la esterilidad y edad de la mujer— que está dada por una clasificación morfológica: a mayor calidad de forma, mayores chances de lograr el embarazo. En general, no se transfieren más de cuatro.
Destino incierto
“Pero el descarte embrionario es imprescindible en cada caso: no todos los óvulos fertilizados continúan su desarrollo, es así que en el momento de la transferencia algunos ya van a haberse detenido, frecuentemente en las primeras divisiones del embrión. Es por esto que cuando transferimos tres o cuatro embriones al segundo o tercer día, no sabemos qué porvenir les depara el destino a cada uno de ellos.”
Si ese destino es llegar a ser bebés, se producirán embarazos múltiples de alto grado, lo cual se considera un fracaso de la técnica.
Por consiguiente, una solución sería dejar en cultivo los embriones durante más tiempo, hasta el quinto día, momento en que se encuentran en estado de blastocisto.
“Si tienen buena morfología, estos embriones tendrán muchas más chances de llegar a ser bebés, por lo tanto se transferirán tan sólo uno o dos, con lo que no se producirían más que embarazos gemelares como máximo, con muchas posibilidades de ser embarazo único.
Por otro lado, se criopreservarán muchos menos embriones, ya que se hubieran descartado los no viables puesto que no habrían llegado a blastocisto. Con esto se evitaría criopreservar y se ahorrarían falsas expectativas”.
QUE SE LOGRA CON EL CO-CULTIVO
– Poder evaluar cuáles embriones no son viables antes de los cinco días, porque se van a detener en su desarrollo.
– Se tendrá la misma cantidad de embarazos por paciente.
– Habrá menos transferencia, ya que en aquellos casos en que los embriones no llegaron a blastocisto no se transferirá.
– Además podría diagnosticarse que el embarazo no se produjo por mala calidad embrionaria.
– Se tendrán más embarazos por transferencia con una mayor tasa de implantación.
– Se transferirán uno o dos embriones, con lo que se acabarían los embarazos múltiples de alto grado.
