Queremos contar nuestro testimonio.
Somos de Miramar, una ciudad pequeña y tranquila, la llaman "La Ciudad de los Niños”.
Pasados dos años de estar casados y felices, decidimos tener un hijo, para completar nuestra dicha. Luego de un año, al no conseguirlo, consultamos con nuestro ginecólogo, y comenzaron los estudios de rutina y otros. Nos dijeron que los espermatozoides no tenían movilidad y a mí me faltaba una trompa de Falopio.
Nos derivaron a un especialista en fertilidad en la ciudad de Mar del Plata, y nos dijeron que teníamos que hacernos un ICSI, en ese momento allí no lo hacían y tendríamos que viajar a Bs. As para hacer una consulta.
Nuestro ginecólogo nos había hablado de Halitus, nos dijo que podíamos consultar en la página de Internet, ya que había un consultorio virtual. Esa misma tarde enviamos un e-mail y de esa manera nos comunicamos, enviamos todos nuestros datos etc.
Comenzamos el tratamiento, viajamos a Bs. As, estábamos muy ansiosos y felices de poder lograr nuestro deseo de ser padres.
Los días se hacían eternos, y llegó el momento de hacer los análisis, dieron negativos, la desilusión fue muy fuerte; nos sentimos muy mal, desganados.
Pasaron seis meses, volvimos a intentarlo, estábamos más tranquilos y comenzamos el tratamiento nuevamente.
Lo habíamos logrado, estábamos esperando a nuestro hijo, tan ansiado y anhelado, por nosotros y nuestra familia.
Hoy Giuliano tiene seis meses, ha cambiado totalmente nuestras vidas, las llenó de amor y de alegría, con cada día que pasa al verlo crecer, es «el regalo más hermoso que nos ha podido dar la vida».
Quisiéramos decirle a otras parejas que están pasando por una situación similar a la nuestra que no pierdan las esperanzas y no se desanimen en el primer intento, vuélvanlo a intentar, «vale la pena».
Gracias a todo el equipo de Halitus.
Luis y Verónica Fariús
Miramar 2003.
