Para desafiar el problema de la infertilidad, muchas mujeres recurren a terapias complementarias al tratamiento médico tradicional. La evidencia científica y la recomendación médica constituyen los dos motivos principales para formar parte de esta tendencia en crecimiento.
Varios estudios clínicos han demostrado en todo el mundo que el estado emocional y el grado de estrés de una mujer repercute negativamente tanto en la probabilidad de concebir un embarazo como en la posibilidad de que este llegue a término. Un grupo de investigadores de Alemania que han utilizado un cuestionario para medir el grado de estrés emocional percibido por sus pacientes, han demostrado que a mayor estrés percibido mayor tasa de aborto, y que ésta se asociada a un desbalance inmunológico en el endometrio de estas pacientes.
Herramientas sanadoras
Halitus Instituto Médico también ha realizado un estudio que utiliza este cuestionario junto con una encuesta de calidad de vida que desarrolló la Sociedad Europea de Reproducción y Embriología Humana (ESHRE) destinada a pacientes que tienen inconvenientes para concebir un hijo. La investigación demostró que más del 50% de las pacientes que deben someterse a un tratamiento de fertilidad, presentan un grado de estrés por arriba de la media de la población general, y que el valor promedio de estrés de todas las pacientes estudiadas se asocia a infertilidad y aborto recurrente.
La medicina mente-cuerpo tiene sus bases en la psiconeuroendocrinoinmunología, esto implica el estudio que relaciona el psiquismo con el sistema nervioso, inmunológico y endocrino: cada emoción o cada pensamiento va a impactar en ese sistema y de acuerdo a la respuesta de esos sistemas también va a influenciar en el psiquismo. Para trabajar sobre el mejoramiento de la calidad de vida, y optimizar los resultados de cualquier tratamiento es necesario implementar un plan totalizador que considere que cada ser humano es uno, único y que tiene necesidades químicas y energéticas diferentes. De eso y más se trata el Sistema de Entrenamiento Especial (SEES).
Este programa de enfoque holístico y multidisciplinario a la medicina reproductiva, integra la medicina del comportamiento (también conocida como “medicina mente – cuerpo”), con la medicina tradicional china y los últimos avances en psicología y manejo del estrés para aquellas pacientes que deben someterse a tratamientos que ofrece la medicina reproductiva.
Las mujeres que realizaron el SEES hicieron referencia a cambios en la percepción general de la vida, actitud más positiva, menos angustia y ansiedad, más relajación, más energía, más alta autoestima, cambios de la postura, de la figura, regulación del ciclo menstrual, aprendizaje sobre alimentación y mejor relación y comunicación en la pareja. Los hombres mostraron interés en participar más del proceso de búsqueda del hijo propio, y las mujeres mostraron interés en mayor participación de sus parejas.
La incorporación de terapias complementarias al tratamiento clínico de la infertilidad de un modo ordenado, objetivo y desde dónde sus resultados puedan ser medidos, evaluados y corregidos se plantea como una opción real y científica para potenciar sus resultados.
La misión es convertir una situación conflictiva en una experiencia de vida trascendente y llena de significado, aprender a cuidar la salud utilizando todas las herramientas que la ciencia pone a disposición para mantenernos sanos. En la medida en que la persona mejore su estado funcional general eso se reflejará en una actitud de mayor apertura y mejor disposición y colaboración ante cualquier diagnóstico, procedimiento y tratamiento.
Fuente: Mia