Las necesidades calóricas durante la lactancia están relacionadas con la cantidad de leche producida, esto es, aquella mujer que amamanta de forma exclusiva necesitaré mayor ingesta calórica que aquella que lo hace acompañada de complemento. Según la Lic. Lucía Molina, nutricionista de Halitus Instituto Médico, “estos requerimientos se cubren, en parte, con las reservas de grasas almacenadas durante el embarazo, que normalmente se utilizan en los primeros meses de la lactancia. El resto de las calorías necesarias son aportadas con la dieta, con un promedio de 500 kcal extras a la dieta habitual”. Si bien las necesidades nutricionales de una mujer que amamanta son mayores que en aquella que no lo hace, teniendo en cuenta que las calorías son necesarias para la producción de leche materna, es importante saber que las reservas grasas almacenadas durante el embarazo suelen cubrir los primeros meses de lactancia. “Pero es necesario sumar un plan alimentario que refleje el aumento de peso logrado durante el embarazo y el peso de ese momento”, aclara Molina.
Nota Completa: Secretos alimentarios para una buena lactancia