El hipotiroidismo es un síndrome caracterizado por el estado metabólico que resulta de la producción deficiente de hormonas tiroideas. La tiroides está localizada inmediatamente por debajo de la nuez de Adán, es una glándula con forma de mariposa que se encuentra en la parte inferior del cuello, por delante de la tráquea. Es una de las glándulas endocrinas más grandes del organismo y su función principal es regular la velocidad de las funciones de todas las células de nuestro cuerpo por medio de la producción de dos hormonas principales, laT4 o ti-roxina y laT3 o tri-iodotironina. Además, el hipotiroidismo se clasifica de acuerdo con la función tiroidea. De esta forma, se llama hipotiroidismo subclínico cuando existen hormonas tiroideas normales con elevación de la TSH inmediata o post estímulo y, en cambio, se llama hipotiroidismo clínico cuando pueden verse hormonas tiroideas disminuidas con elevación de la TSH.
La causa más frecuente de hipotiroidismo en el mundo entero es el déficit de yodo; la primera causa en zonas con suficiente yodo, como nuestra región, es autoinmunitaria -como la Tiroiditis de Hashimoto.
Esta causa la muerte de las células tiroideas por anticuerpos antitiroideos y tiene una incidencia de 4 cada 1000 en mujeres y 1 cada 1000 en varones por año. Presenta algunos factores de riesgo como la predisposición familiar -susceptibilidad genética-, el embarazo si consideramos la predisposición a tiroiditis puerperal, el yodo y algunos fármacos, algunas infecciones. Por ello es importante por ejemplo el seguimiento a largo plazo de tiroiditis subaguda, las citoquinas pueden precipitar la aparición de una enfermedad tiroidea autoinmune, y las radiaciones. La edad y el sexo son también factores de riesgo, se presenta más en el sexo femenino y aumenta la prevalencia de la enfermedad con la edad. Las causas más frecuentes de consulta son por aumento de peso, caída del cabello, cansancio o debilidad y enlentecimiento de las funciones intelectuales. La consulta es muy importante.
SINTOMAS
– Cansancio, debilidad
– Sensación de frío
– Edema duro de miembros inferiores
– Párpados edematosos
– Aumento del tamaño de la lengua, engrasamiento de mucosas faríngeas y laríngeas, voz gruesa
– Piel seca, áspera y descamativa
– Piel pálida y fría
– Caída de cabello, disminución de cola de las cejas, uñas quebradizas y de lento crecimiento
– Disminución de la frecuencia cardiaca
– Disminución de la tensión arterial diferencial
– Aumento de peso con disminución del apetito
– Constipación
– Enlentecimiento de todas las funciones intelectuales, incluyendo el habla.
– Pérdida de iniciativa, enlentecimiento del pensamiento, falta de memoria.
– Somnolencia marcada y letargo
– Cefaleas
– Parestesias en manos, Síndrome del túnel carpiano
– Disminución de los reflejos
– Rigidez y dolores musculares que empeoran con el frío.
– Función reproductiva: Disminución de la libido y ausencia de ovulación. Disminución de la fertilidad y abortos a repetición
– Disminución de la degradación de los lípidos, altos el Colesterol total, los triglicéridos y el LDL
Dra. María Virginia Busnelli,
médica a cargo del departamento de endocrinología
Halitus Instituto Médico.