Cómo evitar la celulitis y estrías en el embarazo

Afectan al 90 por ciento de las mujeres y, durante la gestación, tiende a aumentar su aparición por los típicos cambios hormonales de este período. Conocé qué tratamientos podes realizar, cuáles son los preparados más efectivos y otras recomendaciones que te ayudarán a prevenir su aparición.

La celulitis es una patología que afecta el tejido celular que se encuentra por debajo de la piel, el cual incluye los adipositos y la microcirculación arterial, venosa y linfática. Al comienzo, produce alteraciones circulatorias, que luego provocan modificaciones en la estructura de la piel.

Afecta casi exclusivamente a las mujeres y, generalmente, comienza en la pubertad. Alrededor del 90 por ciento de la población femenina padece de cierto grado de celulitis, y la herencia tiene una gran influencia.

Las estrías atróficas son una forma de cicatrización dérmica, consecutiva a la ruptura y cambios en la configuración de la red de fibras colágenas y elásticas. Predominan en el sexo femenino y personas jóvenes.

Se estima que el 90 por ciento de las embarazadas presentan estrías, que suelen aparecer en las mamas, los muslos y el abdomen. Las mismas son producto del rápido aumento de la tensión y el estiramiento de la dermis, que generan la ruptura de fibras de colágeno y suelen aparecer a partir del sexto mes de gestación. Cuando la celulitis y las estrías se «adueñan» de la piel de una embarazada, ¿qué hacer? La respuesta, a continuación.

Los tratamientos adecuados.

En gabinete se recomiendan:
• Para la celulitis: drenaje linfático manual y masajes reductores, ambas técnicas manuales que mejoran el sistema de drenaje linfático y el tejido adiposo, generando una mejor circulación y aspecto de la piel. También se realiza ultrasonido, ondas mediante las cuales se estimula también el drenaje linfático y la activación de la microcirculación.
• Para las estrías: pulidos corporales, que logran la exfoliación de las células muertas y mejoría en la respuesta dérmica, ayudando a generar más fibras elásticas. Luego del pulido se complementa el tratamiento con la aplicación de máscara con vitaminas A y C.
Generalmente, los tratamientos se comienzan entre semana 14-15, y se sostienen hasta la 30-32. Es el obstetra el que va guiando la duración del esquema.

Todos los tratamientos anteriormente mencionados son inocuos para los embarazos que cursan sin complicaciones, lo que no quita el consentimiento del médico obstetra para cada paciente. Hay embarazadas con trastornos de presión arterial u otras patologías que limitan los tratamientos de esta índole.

Las contraindicaciones son todas las patologías o pequeñas complicaciones que se produzcan en el curso del embarazo. No por ser tratamientos estéticos deben tomarse a la ligera.

En cuanto a los preparados domiciliarios, los pulidores corporales suaves sirven para la celulitis y las estrías. En general, se realizan dos veces por semana. Luego del pulido se aplican cremas hidratantes con vitamina A y úrea, tanto en estrías como en celulitis. Estos principios activos ayudan ala mejoría de la elasticidad y la hidratación.

Uso de cremas o emulsiones

Para prevenir la aparición de estrías y restaurar la elasticidad de la piel, lo mejor es comenzar un tratamiento preventivo al comienzo del embarazo, a través de la aplicación de una crema o emulsión con vitamina A, vitamina E y alantoína. La vitamina A trabaja en el crecimiento de tejidos epiteliales, el aumento de la función inmunitaria y la reducción de enfermedades infecciosas. Además, colabora con la rápida cicatrización de heridas y con la protección general de la piel. La vitamina E inhibe la inflamación y brinda un marcado efecto humectante, mientras que la alantoína promueve y acelera la proliferación celular.

La crema o emulsión debe aplicarse en las zonas más propensas a su aparición, como el abdomen, las mamas, los muslos, las caderas y la zona lumbar. Se recomienda colocarla luego del baño, ya que los poros están abiertos y absorben mejor los nutrientes de la crema, con movimientos circulares ascendentes que favorecen la circulación. Además de prevenir la aparición de estrías, las cremas y emulsiones con vitamina A ayudan a evitar la sensación de picazón, producto del estiramiento de la piel.

Fabián Penno Agradecimientos: Dra. Andrea Pichel, dermatóloga de Halitus Dermatología y Estética; Dr. Leonardo Mezzabotta, jefe de Obstetricia del Sanatorio de los Arcos; y Dra. Mónica Maiolino, dermatóloga asesora de Dermaglós.