A 30 años de aquel primer nacimiento hay muchos avances a tener en cuenta. Uno de los más significativos y más recientes ha sido el co-cultivo de endometrio. Esta técnica consiste en realizar, durante un ciclo anterior, una biopsia de endometrio a la paciente que se cultivará para luego colocar los embriones sobre una capa de células endometriales de la mujer y así brindarles un ambiente más natural para su desarrollo. Se indica en pacientes con fallas repetidas de procedimientos de alta complejidad. En este caso todo el procedimiento se lleva a cabo de la misma forma pero, el día en que la paciente recibe la estimulación ovárica, las células endometriales son descongeladas y cultivadas para que los embriones crezcan en ese medio. Se ha demostrado que de esta forma aumentan significativamente las posibilidades de embarazo, especialmente en parejas que han tenido intentos anteriores con fallas de implantación. (*)
(*) Sergio Pasqualini, Director Médico de Halitus Instituto Médico.