Cigarrillo y fertilidad
¿Cómo incide el cigarrillo en la salud de la mujer, de la pareja que busca un hijo, y del bebé aún por nacer. Aquí respondemos el interrogante.
Se calcula que el tabaquismo provoca 5 millones de muertes anuales en todo el mundo, y que la cifra puede duplicarse para 2030. Por otro lado, diversas investigaciones mostraron que el consumo de tabaco reduce la fertilidad y la fecundidad. Ya sea que fumen uno o dos miembros de la pareja. Por lo tanto, es indispensable que los futuros padres planteen su situación en la consulta obstétrica o de fertilidad, pare que el profesional pueda aconsejarlos sobre los diversos tratamientos para abandonar el hábito.
Cabe destacar que solamente dos tercios de las personas dejan de fumar sin ayuda. Y si bien la mayoría de las embarazadas renuncia al cigarrillo, algunos estudios revelan que -en nuestro país- un 11 por ciento continúa fumando durante la gestación.
Tabaquismo versus fertilidad
Se estima que en cada ciclo el tabaquismo reduce alrededor de un 40 por ciento las posibilidades de quedar embarazada. Según la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva, la nicotina y otras sustancias químicas presentes en el cigarrillo interfieren con la capacidad de producir estrógenos, una hormona fundamental para regular la ovulación y pueden hacer que los óvulos sean más vulnerables a las anomalías genéticas. Asimismo, las toxinas que se liberan y su efecto sobre los vasos sanguíneos afectan las glándulas endocrinas, y por lo tanto también los órganos reproductores, como los ovarios y testículos.
Cigarrillo y embarazo
Las mujeres que fuman durante el embarazo tienen tres veces más probabilidades de dar a luz bebés de bajo peso, sin vida o con malformaciones, mayor riesgo de sufrir abortos, y la leche que producen sus pechos suele ser más escasa y de menor calidad. Además, se incrementa la posibilidad de rotura prematura de saco amniótico, así como de padecer placenta previa. Las fumadoras pasivas, por su parte, son más propensas a contraer cáncer de mama y de cuello uterino. Peor aún si están embarazadas, porque el humo ajeno acentúa el peligro de tener partos pretérminos y bebés de bajo peso.
Con el asesoramiento de: Dr. R. Sergio Pasqualini
ginecólogo especialista en fertilidad
Director de Halitus Instituto Médico
Fuente: Ahora Mamá
