La intolerancia al gluten es la incapacidad del organismo de realizar el proceso de digestión de un determinado alimento.
El sistema de incorporación y asimilación de alimentos es complejo e involucra distintos mecanismos que interactúan entre sí aumentando las células de la pared intestinal y los anticuerpos específicos de esta afección.
En Argentina, se calcula que hay 1 celíaco cada 150 personas y que por cada 1 celíaco diagnosticado hay 9 sin diagnosticar aún. Y es que sólo un 20% de los pacientes manifiesta síntomas clínicos.
Sergio Pasqualini, ginecólogo especialista en fertilidad, Director Científico de Halitus Instituto Médico, advirtió que la celiaquía «puede incidir en la fertilidad de una mujer porque la mala absorción de vitaminas y minerales que genera puede suprimir la acción de las hormonas que estimulan la ovulación».
Sin embargo, Pasqualini comentó que «fundamentalmente, una mujer celíaca deberá enfrentar el problema del bajo peso relacionado a esa mala absorción».
«Los trastornos alimentarios menores, es decir, sin llevar a los extremos de la anorexia o bulimia pueden llevar a una alteración de la fertilidad por afectar la armonía interna que es la que va a permitir la producción del óvulo, la ovulación y hasta la calidad del óvulo en la mujer y los espermatozoides en el hombre», señaló el ginecólogo.
Además, el especialista señaló que el mecanismo por el cual se produce la ovulación «es un mecanismo de relojería perfecto, por lo tanto, cualquier alteración de ese equilibrio puede verse reflejada en un cambio en la ovulación».
«Pero además, debe tenerse en cuenta que no sólo puede verse afectada la ovulación sino también la calidad de los óvulos y esto también puede ser un problema a la hora de buscar un embarazo», manifestó.
Pasqualini dijo que «como resultado de una menarca tardía y una menopausia precoz, las pacientes celíacas suelen presentar un período reproductivo más breve y demorar más en el logro de un embarazo».
«Incluso, los estudios muestran una mayor incidencia de abortos a repetición. En nuestra experiencia, no son pocas las mujeres que llegan a la consulta sin haber sido diagnosticadas como celíacas y al realizar los estudios para establecer las causas de infertilidad aparece el problema. Es importante tomar todos los recaudos y realizar los estudios necesarios para establecer ese tipo de patologías. Por eso es tan importante llevar adelante una dieta balanceada, mantener un peso adecuado y la consulta médica periódica», añadió.
El médico destacó que «siempre es importante trabajar en conjunto con el médico que las controla y el nutricionista, dado que lo principal es garantizar el seguimiento de una dieta acorde y balanceada, libre de gluten, teniendo en cuenta que esta afección puede, en algunas ocasiones, agravarse durante el embarazo o en el posparto».
«A veces, la mujer embarazada puede no darse cuenta que es celíaca y es importante realizar el chequeo ante el mínimo síntoma porque el déficit alimentario que esta afección genera puede traer consecuencias en el desarrollo fetal», manifestó.
Pasqualini puso de relieve la importancia a la hora de alimentarse de «evitar la presencia de gluten en la dieta ya que aumenta el riesgo de padecer efectos secundarios a largo plazo».
«Es por ello que las personas con esta enfermedad no deben incluir en la dieta alimentos con trigo, avena, centeno y cebada (presentes en las pastas, el pan, la cerveza, fiambres, sopas crema, productos de repostería y pastelería, conservas, helados, caramelos e incluso el chocolate). Además, la consulta al especialista en fertilidad si presentan problemas para lograr el embarazo», concluyó.
Fuente: terra.com.ar