Señor Dr. R. Sergio Pasqualini y equipo
Como se imaginarán la llegada de nuestro hijo ha sido el acontecimiento más emocionante e inolvidable que hemos vivido, no solo como pareja, sino en toda nuestra vida.
Cada minuto de este embarazo tan esperado y tan soñado, será una imagen imborrable en nuestros más queridos recuerdos. Y gran parte de esos momentos, tuvimos la suerte de compartirlos con ustedes, que disfrutaron con nosotros cada una de estas alegrías vividas mientras esperamos a nuestro bebé.
En estos casi once meses de esta amistad que nos une desde nuestra primera consulta, siempre encontramos en Halitus una sonrisa y una solución para cada una de nuestras preguntas y dudas de padres, primerizos y ansiosos. Siempre una puerta abierta, alguien dispuesto a escucharnos, a explicarnos, a tranquilizarnos, a contenernos y a comprendernos. Y lo más importante es que en Halitus encontramos el tratamiento que nos dio la posibilidad de quedar embarazados.
Por eso y con ustedes disfrutamos la noticia del embarazo, las primeras imágenes de ese pequeñísimo embrión, que poco tiempo después descubriríamos (también con ustedes) que era un varón, que crecía, que tomaba forma, que se movía, que se escuchaba y que se sentía. Y a medida que pasaba el tiempo, descubríamos que absolutamente todas las personas que nos acompañaron en cada una de estas etapas, disfrutaba y estaba al tanto de las maravillosas noticias que día a día íbamos recibiendo.
Imagínense si compartimos momentos con ustedes que estuvimos en Halitus hasta las 22.00 hs. del 7 de enero de 2003, el último día que Ian pasó en la panza de su mamá, escuchándolo mediante el monitoreo y enterándonos que ya estaba preparado, que ya venía, que finalmente lo íbamos a conocer.
Por todo esto y muchísimas otras cosas que podríamos enumerar, queríamos agradecerles el haber hecho todo lo que hicieron para facilitarnos ser los papás de Ian, que acaba de cumplir un mes y que me mira, mientras yo escribo, desde su cochecito, sin todavía comprender lo infinitamente importante que es para nosotros, y para nuestras familias.
A todo ese equipo maravilloso, en especial al Dr. Marcelo Martínez que fue quien nos acompaño día a día en esta hermosa aventura, y muy especialmente a usted Dr. R. Sergio Pasqualini.
Con mucho cariño, una vez mas ¡GRACIAS!
Verónica, Horacio e Ian Cabak
