Escribo para agradecerte por el hermoso espacio que brindaste el dia Sabado en tu desayuno.
Estoy muy feliz de haber sido parte y de haberme cruzado con vos en este camino, tenes una calidez humana pocas veces vista, una nata vocacion de servicio y ademas, el grupo me parecio muy agradable, quede mas que satisfecha con el encuentro y el espacio que nos diste a cada una.
Desde ya, me brindo y me uno a vos, en lo que necesites de ahora en mas, para que ninguna mujer transite sola este camino.
Te mando un beso y un abrazo enorme!
Nos vemos el sabado!
Priscila