Gracias a Dios tuvimos suerte de poder acercarnos al Instituto, donde fuimos recibidos de la mejor manera. Desde que se ingresa -solamente a preguntar- hasta la etapa final en que se es padre, pasaron muchas cosas, pero el trato, la atención hacia nosotros fue excelente, desde el portero del edificio hasta la autoridad máxima, como es el Dr. Pasqualini. Sinceramente no tengo palabras para agradecer, a todos. No me quiero olvidar de ninguno, pero no puedo dejar de nombrar al Dr. Pasqualini, la Dra. Andrea Marazzi, Dr. Oscar Mulki, Dra. Adriana Sarto, la Licenciada Claudia y con el que más trato tuvimos, que es como un hermano, al Dr. Alejandro Falco. También por supuesto a Alicia y a todas las chicas y secretarias.
Pero quiero destacar, que siendo tan profesionales como son, nos hayan tratado con mucho amor y comprensión, cosa que hoy día es muy dificil ver en cualquier ámbito.
Una vez más agradecemos todo lo que han realizado por nosotros y por nuestros mellizos Mateo y Simón
Saludos y un abrazo enorme Fabio y Graciela.