Mientras la tasa de natalidad de la Argentina muestra una caída desde el 2010, existe la posibilidad de observar una mejora en los próximos meses por el aislamiento obligatorio en el marco de la pandemia del coronavirus. Si bien muchos ya piensan en si nacerán más bebés en diciembre y enero del año que viene que en otros años, los expertos tienen algunos reparos.
Cuando se cumplan nueve meses desde el inicio del encierro obligatorio que impuso el gobierno, podría haber más nacimientos que en los años anteriores. En el país, la cantidad viene en baja desde 2010 y en 2018, por primera vez en la década, estuvo por debajo de los 700.000 bebés: fueron 685.000.
A menos que se dediquen a algunas de las actividades eximidas, las parejas pueden compartir más tiempo en sus casas que antes. También, las que no están exceptuadas pero igual hacen home office eliminaron de su rutina el tiempo de viaje al trabajo. Por otro lado, se redujo la oferta de actividades extra laborales.
Hay quienes creen que esta circunstancia atípica le abre la posibilidad a más encuentros sexuales que antes. Y en parejas heterosexuales, eso podría significar más embarazos. Sin embargo, los expertos no lo ven tan así. El médico psiquiatra y sexólogo Walter Ghedin, aseguró que «la llegada del coronavirus está provocando un cambio radical en los hábitos sociales, por ende, también influye en la vida amorosa y sexual. Ya existen desacuerdos a la hora de acercarse, de besarse; ni hablar de tener sexo».
Y agregó: «La presencia del otro las 24 horas, la ansiedad que provoca el encierro y el cambio de hábitos, la presencia de los hijos, niños o adolescentes, que requieren atención y contención, todo va en desmedro de la intimidad», dijo. El médico ginecólogo especialista en fertilidad Sergio Pasqualini, agregó que «puede que haya menos nacimientos por el miedo a que haya menos trabajo y la inseguridad económica».
Además, «en broma uno decía: veamos dentro de nueve meses cuántos bebés más nacen y cuántos divorcios antes de los nueve meses habrá también», analizó.