Fertilización In Vitro: esto es lo que tenés que saber sobre la FIV - Halitus Instituto Médico - Líder en tratamientos de Fertilización asistida

Mundo Halitus

Inicio - Mundo Halitus - En Los Medios

Por: Ohlala | 17/04/23

Fertilización In Vitro: esto es lo que tenés que saber sobre la FIV


Si en tu búsqueda por conseguir un embarazo te encontraste con que tenés que realizar una Fertilización In Vitro, seguramente te surgieron un montón de preguntas. En esta nota te contamos todo lo que tenés que saber sobre esta técnica.

La Fertilización In Vitro (FIV) es un tratamiento de alta complejidad con el que se intenta lograr la fertilización del óvulo por el espermatozoide en el laboratorio para que, si evoluciona normalmente, el embrión sea transferido al útero o criopreservado.

¿A quiénes y cuándo se indica?

Se indica a personas o parejas que por algún motivo no logran concebir de manera natural. Pueden ser pacientes que tengan las trompas afectadas o ausentes, mujeres de más de 38 años, con baja reserva ovárica o endometriosis severa; hombres con mala calidad espermática (con concentraciones espermáticas por debajo de los 5 millones) o pacientes que lleven muchos años sin lograr el embarazo con inseminaciones o tratamientos de baja complejidad.

¿En qué consiste el tratamiento?

“El tratamiento comienza con una estimulación ovárica que se le hace a la mujer para que, en vez de un óvulo, tenga más de un óvulo en ese ciclo”, explica Pía Zgrablich, directora médica del centro GESTAR.

Luego se va siguiendo el desarrollo con ecografías transvaginales, hasta que los folículos tienen un tamaño determinado. Entonces se aspiran fuera del cuerpo de la mujer (de ahí su nombre: in vitro) y se juntan en el laboratorio los óvulos junto con los espermatozoides, para formar embriones. Luego de unos días de formados los embriones en el laboratorio, se le transfieren al cuerpo de la mujer.

Los óvulos obtenidos por punción se ponen a fecundar con una muestra de semen, que puede ser de la pareja (hablando de una pareja heterosexual, con una buena calidad espermática) o bien de un banco de semen (hablando de parejas homosexuales o mujeres que eligen iniciar tratamiento sin pareja).

Se fecundan todos los óvulos maduros, salvo que la pareja no quiera congelar y que no quiera que haya embriones sobrantes. En ese caso, se fecundan sólo los óvulos que se van a transferir. Pero si la pareja quiere congelar, se fecundan todos los óvulos maduros que se hayan aspirado; luego se eligen uno o dos embriones para transferir y el resto se criopreserva.

A los 15 días de la transferencia la mujer se hace un análisis de sangre para ver si está o no está embarazada. Si no está embarazada deja de colocarse la suplementación de progesterona y menstrúa.

¿Cuándo se transfieren los embriones?

Los embriones se dejan evolucionar durante 5 días en el incubador del laboratorio de Fecundación In Vitro hasta alcanzar el estadío de blastocisto (día 5 o día 6 de evolución).

Una vez alcanzado este estadío, se procede a realizar la transferencia embrionaria, durante el cual se coloca el embrión dentro de la cavidad uterina de la paciente. “Este procedimiento es sencillo, no produce dolor, es rápido y no es necesario aplicar anestesia”, asegura Sergio Pasqualini, director de Halitus Instituto Médico.

La FIV puede realizarse con gametas (óvulos y espermatozoides) propios o con uno o ambos donados. La tasa global de éxito en menores de 35 años es de 35%, disminuyendo a partir de esa edad. Y del 55 al 60% en los casos de hacer el tratamiento con óvulos donados, aseguran los especialistas.

¿Qué diferencias tiene con otros tratamientos?

La Fecundación In Vitro (FIV) suele ser más invasiva que los tratamientos de baja complejidad. Esto se debe a que la paciente tiene que utilizar medicación que en general es inyectable y subcutánea. Además, tiene que pasar por un evento quirúrgico denominado punción, un procedimiento de carácter ambulatorio que permite lograr la extracción de los ovocitos.

“En general, este procedimiento no suele presentar complicaciones. De existir alguna, el porcentaje de que sucedan es muy bajo, menor al 1%. Alguna paciente podría tener una hiperestimulación ovárica u hemorragias post punción, pero realmente son muy pocas las probabilidades”, comenta Natalia Fernández Peri, directora médica de WeFIV. 

La especialista señala que este es el tratamiento que mejores chances le va a dar a la paciente o pareja para poder lograr el embarazo y que incluso les permite ser “diagnóstico”, ya que brinda mucha más información porque conocen más sobre la calidad de óvulos y espermatozoides y pueden ver cómo se comportan en la fecundación, qué tipo de embriones generan (pensando en las calidades del embrión). Esto no sucede en un tratamiento de inseminación artificial o baja complejidad.

¿Cuántos tratamientos pueden hacerse?

Tantos como médicamente se justifique seguir insistiendo. Hay veces que el médico dice basta, hay veces que los pacientes, pudiendo repetir, dicen basta. Puede ser que no se justifique reintentar con óvulos o espermatozoides propios y sí con alguno o los dos donados.

Médicamente no hay un número límite de tratamientos a llevar a cabo. A medida que va avanzando en el tratamiento, se va teniendo más información del ciclo. Esto permite evaluar la posibilidad de cambiar de tratamiento, si no se está teniendo los resultados esperados. En general, dos o tres tratamientos permiten determinar si se está llevando el tratamiento indicado o si hay que hacer un cambio, como podría ser una ovodonación.

¿Cuáles son los costos? 

La ley 26.862 contempla el acceso integral a los procedimientos y técnicas médico-asistenciales de reproducción médicamente asistida dentro del Programa Médico Obligatorio (PMO). Es decir, que las obras sociales tienen la obligación de llevar a cabo este tipo de tratamientos. A su vez, cada empresa de medicina prepaga tiene distintos convenios u acuerdos con algunas clínicas privadas. Por eso la recomendación es consultar por las prestaciones del plan.

Según la ley, las prepagas y obras sociales deben cubrir hasta tres tratamientos de alta complejidad de por vida, con pausas de tres meses entre cada uno de ellos.

En cuanto a los costos aproximados, en Halitus el tratamiento de Fertilización In Vitro cuesta $594.000 y 1.000 dólares (calculado a tipo de cambio vendedor regido por el Banco de la Nación Argentina), con la medicación para la estimulación aparte.

En WeFIV, en tanto, el tratamiento tiene un valor aproximado de $699.000 más IVA.

Mientras que en GESTAR el tratamiento de FIV cuesta $622.000 más IVA.


Link Noticia Original