Todos los que buscan sentir orgasmos más intensos y placenteros, deben conocer la técnica sexual llamada “surfing” que está en auge en la actualidad: enseña tanto a los hombres como a las mujeres, a conocer su cuerpo y a reconocer las reacciones que se sienten cuando se está bajo ciertos estímulos.

El orgasmo, ese momento de clímax que se siente durante el sexo o la masturbación, es la liberación física de la tensión sexual que se genera en el cuerpo cuando entra en esa fase de excitación. Las mujeres son diferentes a los hombres y, en el caso de ellas, puede incluso durar más y repetirse múltiples veces en un período de tiempo corto. Así lo explica el sitio www.soycarmin.com

El surfing es el acto de interrumpir el orgasmo cuando está a punto de llegar, pero no para dejarlo ir sino para permitir que el cuerpo y la mente se concentren en otros puntos de placer. De esta forma, cuando por fin decidas tener el orgasmo, éste será más intenso y duradero.

Para lograrlo, sólo hay que aplicar algunas técnicas. Por ejemplo, para las mujeres, cuando se siente que ya se está a punto de lograrlo, dejar de estimular el clítoris y enfocarse en otra áreas del cuerpo que sean también una posibilidad de estímulo erógeno. 

La sensación sigue siendo placentera y se tiene la oportunidad de lograr más tiempo de placer.

Dominar esta práctica no es fácil pues suele ocurrir o que no hay una comunicación fluida en la pareja, que no nos animamos a explorarla o que al dejarse llevar por el instante, se pierda el control de la situación o por el contrario todo se vuelva tan racional y pensado que la magia termina.

Es por eso que para aprender a usar el “surfing” es importante tener en cuenta la masturbación, que permite explorar el propio cuerpo y conocerlo, para estar muy consciente de la excitación, la intensidad y sus niveles. Para el surfing también es útil usar la mente, no sólo evitar tocar o disminuir los movimientos sino para estar atentos al instante preciso que buscamos.

Durante el orgasmo se producen contracciones de los músculos de la región perineal y de otras partes del cuerpo. En ese momento de descarga se produce una elevación de la presión arterial, de la frecuencia cardíaca y del ritmo respiratorio.

Los orgasmos son diferentes no solamente de una persona a otra, sino en la misma persona dependiendo del momento, la ocasión y la estimulación. Incluso hay personas que durante el orgasmo pierden el conocimiento por poco tiempo, porque los cambios cardiorespiratorios son muy violentos. Algunas otras tienen la capacidad de disfrutar de varios orgasmos en un solo encuentro sexual, mientras otras no alcanzan a tenerlos.

Beneficios del surfing durante la menopausia

Un estudio publicado en el diario The New York Times determinó que aproximadamente la mitad de las mujeres menopáusicas sufren sequedad vaginal y relaciones sexuales dolorosas. Sin embargo, la misma investigación detalló que, ante esta problemática, menos de la mitad de las afectadas consultó a un especialista.

“La baja de los estrógenos y del colágeno, principalmente, generan en la mucosa vaginal la disminución de la humedad, de la turgencia y de la elasticidad características de la vagina, del mismo modo que toda la piel y tejidos de la mujer lo van perdiendo con el transcurso de la edad”, aseguró la doctora Beatriz Literat, médica sexóloga clínica y ginecóloga.

En ese sentido, recomendó acudir a un especialista ante la aparición de los primeros síntomas. “Apenas la mujer nota molestias en sus relaciones sexuales debe comentárselo a su ginecóloga o concurrir a la consulta sexológica”, sostuvo. 

Al mismo tiempo instó a no perder tiempo “con consejos caseros porque frecuentemente, además de no solucionar nada, empeoran la situación”. Una de las primeras afectadas por estos síntomas es la vida sexual de la mujer. La médica afirmó que la preocupación comienza cuando “se notan diferentes durante la penetración y no consultan, iniciando una etapa de irritación local, dolor vaginal y luego rechazo a las relaciones sexuales”.

Pero, más allá de los padecimientos físicos, existen también los de tipo emocional. La sexóloga mencionó que, “al no tener una explicación de lo que les está sucediendo, o al disponer de una información parcial, las mujeres comienzan a fabricar hipótesis, como ‘seguro que mi deseo disminuyó, ya no debo quererlo tanto’ o ‘estoy volviéndome seca’”.

En esa línea, detalló: “Desde la utilización de geles y cremas específicas para humectar y nutrir los tejidos (igual que se hace en el rostro) hasta el uso de láser intravaginal, inyecciones de sustancias con ácido hialurónico y otros tratamientos locales. Los resultados son excelentes, lo que permite recuperar la calidad de vida”.

Justamente el surfing permite una mejor lubricación en las zonas erógenas femeninas, y colabora con estos inconvenientes que surgen en la etapa de la menopausia para vivir una sexualidad más plena, sin molestias, ni dolores. Es fundamental la comunicación con la pareja para explorar juntos cómo y hasta donde llegar en cada momento.