Yo me hice sola en tratamiento porque no tengo pareja, hice 3 inseminaciones y invicto y ahí me operaron de un mioma que cómo está en el cuello del utero no lo pudieron sacar.
Pasado un año descongele ovulos que había crioconservado hacia 5 años y no servían. En ese momento se me vino el mundo abajo. Después hablé con la Dra Tomatis y vimos la posibilidad de la ovodonacion.
En mayo de 2019 cuando estaba en pleno proceso de preparación para la transferencia, me quebré la mandíbula y eso provocó que todo se atrasara un mes más.
El día que se aspiraron los ovulos a mi donante, la Dra Tomatis me llamo para decirme que no eran buenos y que iba a tratar de conseguir otra donante. En ese momento, tiré la toalla.
Al otro día me llamaron para decirme que habían conseguido una nueva donante.
La verdad que cuando fui a hacerme la tranferencia, no tenia demasiadas expectativas.
Esos 15 días sentí dolores premenstruales, así que supuse que no había “prendido”, hasta que me hice el análisis y… positivo!!!
Hoy tengo a mi bebé en brazos y no lo puedo creer.
Por eso digo, el camino es largo y doloroso, pero vale la pena.
Si yo con 44 años, inhibidos lupico positivo, mioma gigante, sin pareja, pude lograrlo, hay que seguir intentándolo!
Gracias a todo el equipo de Halitus por apoyarme en esta travesía!
Nombre del autor: Carla