Las náuseas y vomitos generalmente son matutinos y pueden ser exacerbados por el olor de las comidas. Es fundamental detectar qué alimentos y situaciones los aumentan.
Por fortuna, esta complicación casi siempre se auto limita hacia el final del primer trimestre. Adaptar la alimentación en esas semanas es importante para aportar los nutrientes esenciales mÃnimos de esta etapa.
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Consejos a tener en cuenta:
1. Disminuir el volumen de los alimentos ingeridos.
2. Aumentar la frecuencia de las comidas, a 4 comidas principales y 2 o 3 colaciones.
3. Evitar ingerir grandes cantidades de lÃquidos en el momento de las comidas. Preferir los lÃquidos sin gas y preferentemente entre comidas de a pequeños sorbos. Los jugos cÃtricos tampoco están recomendados.
4. Los alimentos de más fácil digestión son las galletitas de agua, pan desecado o levemente tostado, copos de cereal.
5. Los alimentos con alto contenido de grasa (productos de panaderÃa, snacks, embutidos, quesos duros, fritos, etc.) deben permanecer mucho tiempo en el estómago para su digestión por lo cual no se recomiendan en esta etapa. Es conveniente optar por lácteos descremados y cortes de carne magros, preferentemente cocidos en medio húmedo sin generación de costra de tostación.
6. Los vegetales de hoja verde y aquellas ensaladas de gran volumen no son aconsejadas en esta etapa por generar sensación de distensión abdominal que no colabora con los sÃntomas. Es preferible optar por frutas y verduras cocidas (de a pequeños volúmenes).
7. Los caldos o infusiones calientes no mejoran los sÃntomas, por el contrario, pueden agudizarlos. Retirar el mate y el café es fundamental.
8. Es importante dejar pasar un rato después de las comidas para recostarse o para subirse a algún medio de trasporte (colectivo, auto, subte).
Fuente: Halitus Instituto Médico
