Finalmente, la hora llegó y los esfuerzos realizados por Fundación REPRO comienzan a dar sus frutos. El Simposio se llevó a cabo dentro de un clima de confianza, como también predisposición y curiosidad para comprender la relación de los camélidos con la biotecnología, y actualizarnos acerca de cuáles son los avances tecnológicos obtenidos hasta el presente, cuales son los pasos a seguir y, fundamentalmente, para qué se invierten esfuerzo y recursos en poner a punto estas técnicas.
Me viene a la mente una conferencia de Donella Meadows en 1994 que mencionó «Necesitamos claridad acerca de nuestros objetivos. Necesitamos saber hacia dónde vamos. Necesitamos una visión. Y esa visión debe estar articulada» por lo que no sólo debemos saber que es posible llevar a cabo sino también para que deseamos hacerlo. Está claro que por la fisiología de los camélidos es necesario incrementar artificialmente la velocidad del progreso genético para la obtención de resultados pero en la actual situación de cría no podemos afirmar que sea una herramienta prioritaria ya que se debe trabajar en manejo animal, selección de buenos ejemplares, nutrición y sanidad. No obstante esto no implica que se deba esperar a lograr lo mencionado para comenzar a ajustar las técnicas necesarias para incrementar la velocidad del progreso genético y así obtener resultados más rápido. El Simposio fue un paso importante para conocer el estado de situación tecnológico, ganadero y social de sus principales criadores, parafraseando a la Sra. Donella Meadows se podría decir que el simposio nos dió cierta claridad acerca de nuestros objetivos, nos señalo hacia donde debemos ir, nos ayudó a comenzar a vislumbrar una visión y, como desafío nos deja la misión de articularla.