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Por: Buena Salud | 15/07/11

Terapias naturales en tratamientos de infertilidad


El estrés es uno de los factores que más influye en la pareja a la hora de buscar un embarazo. En esta nota, todos los tratamientos alternativos que integran cuerpo, mente y espíritu, para mejorar los resultados de los tratamientos de infertilidad.

La búsqueda de un hijo es una etapa muy importante en la vida de la pareja. Pero ¿Qué pasa cuando la noticia del embarazo nunca llega? Si bien existen múltiples factores que pueden causar la infertilidad (cuestiones orgánicas, edad de los padres, cigarrillo, peso, etc.), el estrés es uno de los enemigos principales, incide de manera notable en la mujer que busca un embarazo. Por eso es que una mirada holística sobre la persona, y tratamientos alternativos que integren cuerpo, mente y espíritu, pueden mejorar los resultados y aumentar la calidad de vida de los futuros padres.

Cuándo y en qué situaciones se puede hablar de infertilidad

El doctor Sergio Pasqualini, Director de Halitus Instituto Médico, explica que al hablar de infertilidad nos referimos fundamentalmente a la incapacidad de fecundar en el varón, y de concebir en la mujer: “Como la alteración puede estar en cualquiera de ellos, es indispensable que la evaluación sea de pareja, y que el diagnóstico se haga en forma integrada y simultánea”, afirma el especialista.

Las terapias alternativas como complemento de la medicina reproductiva

Hoy no hay dudas de que los factores psicológicos se entrelazan con los fisiológicos. Y es por eso que los profesionales de la medicina reproductiva reconocen la incidencia del estrés en quienes realizan tratamientos: “El diagnóstico de infertilidad y los casos de reiterados fracasos, llevan a que los niveles normales de estrés se eleven. Sumado a esto, se genera un gran cuadro de angustia y ansiedad que afecta mucho la calidad de vida de los pacientes”, explica Pasqualini. Es por eso que cada vez más médicos recurren a las medicinas alternativas como complemento de la medicina tradicional. De esta forma, se basan en el concepto de que todos los aspectos de la vida del paciente – emocional, física y espiritual – impactan de una manera u otra sobre su fertilidad.

Método 1 Acupuntura + Fitoterapia

Cómo actúa: cuando se utiliza la Acupuntura combinada con otros tratamientos, como la Fitoterapia, ésta es probablemente mucho más efectiva para aquellas parejas que están experimentando algún tipo de problema funcional como ovulaciones irregulares o alteraciones de la producción de espermatozoides. Tengamos en cuenta que la función principal de la Fitoterapia dentro de los tratamientos de infertilidad, consiste en utilizar aquellas plantas que influyan en las hormonas para que produzcan más óvulos y espermatozoides, y que ayuden a superar los problemas emocionales.

Qué se recomienda: si se utiliza Fitoterapia con hierbas chinas mientras se realizan tratamientos médicos convencionales, es importante informarle al médico tratante. Esto es así, ya que algunas hierbas pueden interferir con la función de las drogas para mejorar la fertilidad, así como en los procedimientos a los cuales se debe someter tanto la mujer como el hombre.

Resultados: el objetivo de la Acupuntura es el de enviar el necesario flujo sanguíneo a los órganos reproductivos y estabilizar los niveles hormonales. Todo esto contribuye a incrementar la función ovárica en las mujeres y la producción de esperma en los hombres.

Método 2 Meditación

Cómo actúa: la práctica de la meditación beneficia tanto al practicante como a los que están a su alrededor. Sus efectos positivos se reflejan en los aspectos físico, emocional, mental y espiritual.

Qué se recomienda: la utilización de técnicas de meditación en las parejas con problemas de fertilidad, disminuye el estrés. Se puede practicar en cualquier hora del día pero se recomienda a la mañana porque la mente se encuentra fresca.

Resultados:
• Disminuye de la presión sanguínea.

• Ajusta el sistema límbico (mejorando la respuesta emocional).

• Equilibra los sistemas nervioso central, simpático y parasimpático.

• Reduce la frecuencia de las ondas cerebrales facilitando el descanso.

• Genera vitalidad y aumenta las reservas de energía.

• Incrementa la resistencia al estrés.

• Proporciona seguridad y confianza en uno mismo.

• Mejora el desarrollo de las actividades cotidianas y las relaciones personales.

Método 3 Reiki

Cómo actúa: es una técnica de sanación natural mediante la canalización de la energía vital a través de las manos. Toma al ser humano como un todo, y así armoniza todos los planosdelSer.

Qué se recomienda: se puede utilizar conjuntamente con el tratamiento médico tradicional. Es una terapia que lo complementa pero no lo sustituye. Actúa de forma preventiva y curativa, ya que equilibra las energías, libera las emociones, desarrolla la conciencia, aumenta la creatividad y eleva la energía vital.

Resultados: el Reiki se fundamenta en la canalización positiva de la energía vital. Cuando la energía circula de forma positiva, el individuo se siente feliz y sano. Si por el contrario, esa energía circula desequilibrada, surgen las enfermedades, el malestar emocional y la infelicidad.

Método 4 Terapia Floral

Cómo actúa: la Terapia Floral se fundamenta en el equilibrio cuerpo-mente a través de la administración de aceites esenciales naturales extraídos de árboles, arbustos, hierbas y flores de todo el mundo. Permite tratar las dolencias y afecciones corporales en forma holística.

Qué se recomienda: para el estrés se recomienda lavanda o azahar, ya que contribuyen a equilibrar el sistema nervioso central, liberar tensiones, y generan una sensación de bienestar. Para la intimidad, se aconseja ylang ylang, rosa o jazmín. Permiten crear un clima de intimidad propicio, y favorecen el acercamiento.

Resultados: a través de esta terapia se busca que afloren los procesos de curación innatos en cada persona, como respuesta a cada aroma.

Método 5 Yoga

Cómo actúa: contribuye al descanso y la relajación. Ayuda a centrar la atención en uno mismo, así como en nuestros movimientos y respiración. Todo esto aliviana tensiones, estrés, y equilibra el organismo.

Qué se recomienda: además de todos lo beneficios internos aportados por el Yoga, existen ciertas posturas que han sido formuladas especialmente para mejorar el funcionamiento de los órganos reproductivos y fortalecer la zona pélvica. Se aconseja no realizar asanas exigentes ni sesiones de yoga agitadas. Lo ideal es que las prácticas sean distendidas para así equilibrar la energía.

Resultados: junto a otros remedios naturales como, por ejemplo, los masajes y la dieta, el Yoga ha demostrado ser una medicina holística sumamente efectiva para tratar la infertilidad y sus efectos colaterales emocionales.

El factor estrés en las mujeres

La experiencia negativa del diagnóstico de infertilidad o los continuos fracasos en los intentos por lograr un embarazo, elevan considerablemente los niveles de estrés. Estrés que, a su vez, disminuye las probabilidades de éxito de un tratamiento de fertilidad. La mujer llega al consultorio con una carga importante de pensamientos negativos como “nunca voy a lograr embarazarme”, o peor aún, “nunca seré feliz si no logro este embarazo”. Entonces –desde una visión holística- nos concentramos en la práctica por cambiarlos por otros que son más objetivos y sanos como “Estoy haciendo todo lo posible para embarazarme”.

La idea para tratar la infertilidad es convertir una situación conflictiva en una experiencia llena de significado. Por eso que un enfoque mente-cuerpo reconcilia la relación con el cuerpo a través de una nutrición adecuada, ejercicio, yoga, respiración profunda, o masajes. Todo esto es lo esencial para encarar cualquier tratamiento de fertilidad, tomar decisiones correctas, y aumentar sus chances de éxito.

Desde hace ya más de tres décadas que los profesionales de la medicina reproductiva hemos reconocido el impacto del estrés sobre el paciente infértil como una seria complicación de la patología y su tratamiento.

Asesoramiento
Dr. Sergio Pasqualini, ginecólogo especialista en fertilidad. Director de Halitus Instituto Médico.

Fuente: Buena Salud