La consulta periódica y la atención especial a cada una de tus necesidades forma parte del cuidado de la salud femenina en todas las edades. La ginecología analiza la patología funcional y orgánica del aparato genital femenino, permitiendo detectar patologías en forma temprana y así no perder la oportunidad de tratarlas a tiempo.
Es importante que toda mujer, independientemente si tiene o no algún tipo de manifestación clínica, realice controles periódicos con su ginecólogo de cabecera. La revisión ginecológica tiene como objetivo evaluar el estado del aparato genital y las mamas, para comprobar su normalidad o constatar la existencia de patologías que requieran tratamiento y detectar factores de riesgo que deban corregirse. Sólo de esta manera se podrán prevenir o detectar precozmente muchas enfermedades que hasta el momento de la consulta no ocasionan síntoma alguno.
Existen distintas etapas en la vida madurativa de la mujer y la ginecología debe controlar, informar, prevenir y tratar situaciones que comprometan su salud.
El control ginecológico anual es un requisito ineludible en la actualidad ya que permite determinar el estado de salud de la mujer, informarla sobre su funcionamiento ovárico, sobre la importancia del auto examen mamario, sobre el riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual y cómo prevenirlas. Además, brinda pautas de procreación responsable, de períodos apropiados entre partos, de amamantamiento, de métodos anticonceptivos adecuados a las distintas edades de la mujer y de educación sexual. Hoy en día, también es importante como parte de la planificación reproductiva, que se haga un asesoramiento y evaluación de la reserva ovárica para poder determinar si fuese oportuno vitrificar óvulos o no.
En el control periódico se realizará: